México tiene un gran potencial de desarrollo energético, lo cual brinda grandes oportunidades de crecimiento y desarrollo, así como de mejores condiciones de vida para toda la sociedad mexicana.
El gobierno federal, mediante la formalización de la Estrategia Nacional de Energía (ENE), pretende incentivar el desarrollo del sector energético donde se plantea como pilares el crecimiento económico, la inclusión social, además de establecer un plan de acción a implementarse los siguientes 15 años.
El documento presenta tres partes fundamentales:
- Presenta 22 temas “estratégicos” en el sector y plantea un programa para resolverlos, en tres periodos (2018, en 2024 y en 2027).
- Presenta dos “objetivos estratégicos”
- El crecimiento del PIB, encaminado al desarrollo de actividades productivas,
- La inclusión social, que genere igualdad, desarrollo social y humano, a través del acceso universal a la energía, oportuno y de calidad.
Para lograr estos objetivos, se presentan 4 medidas de políticas: sistemas de transporte, almacenamiento y distribución de combustibles y electricidad; capacidad de refino, procesamiento y generación; producción de petróleo, y transición energética. Con esto se busca que el país se encuentre interconectado y con la infraestructura que propicie desarrollo regional; enfrentar los retos relacionados con la producción de los combustibles y la diversificación de su generación; tener una explotación sostenible de los recursos petroleros, así como realizar una transición hacía energías limpias, entre otras cosas
Para que estas medidas de política sean eficientes, la estrategia plantea tres elementos de integración:
- Sustentabilidad: lograr un sector sostenible y diverso en energías no fósiles
- Eficiencia energética y ambiental: aplicar las mejores prácticas en la producción y el consumo
- Seguridad energética: tener certidumbre en el abasto de energía
La proyección estratégica que hoy México haga del sector energético será fundamental para su desarrollo. La sociedad, gobernantes y académicos son conscientes de su importancia, por ello se deben tomar decisiones responsables que permitan que esta estrategia se desarrolle de manera eficiente, pues las acciones y objetivos que plantea son necesarios para generar bienestar a la población
